Sí. Las prioridades del tester deberían cambiar dependiendo el propósito de la aplicación.
El enfoque principal para aplicaciones B2C debe es centrarse en la simplicidad, funcionalidad y diseño (es decir, la experiencia del usuario).
Como alternativa, las aplicaciones B2B y B2E pueden exigir el uso y por lo tanto no es necesario centrarse tanto en la participación del cliente.
Es crucial, para aplicaciones empresariales tener una política de seguridad confiable, que protege tanto a la empresa y la información del usuario privado. Los desarrolladores que se deben considerar las limitaciones de los diferentes dispositivos, las cuales deben ser tomadas en cuenta a la hora de realizar las pruebas de seguridad.
En términos de software, los problemas de seguridad móviles son muy similares a los de las aplicaciones de escritorio y web. La principal diferencia es que los dispositivos portátiles pueden ser perdidos o robados. Esto significa que los desarrolladores tendrán que considerar la forma en que los datos se almacenan de manera que, si el dispositivo no caiga en las manos equivocadas, la información sensible esté protegida.
Solo para complementar el artículo, a continuación breve concepto de : B2C, B2B y B2E.
B2C es la abreviatura de la expresión Business-to-Consumer («del negocio al consumidor», en inglés).
Se refiere a la estrategia que desarrollan las empresas comerciales para llegar directamente al cliente o consumidor final.
Los dos principales desafíos a los que se enfrenta el B2C son la creación de tráfico y el mantenimiento de la fidelidad de los clientes. Debido a la naturaleza del B2C muchas pequeñas empresas tienen dificultades para entrar en un mercado y seguir siendo competitivas. Además, los compradores en línea son muy sensibles al precio y es fácil que sean atraídos por otros vendedores. Por lo que la adquisición y mantenimiento de nuevos clientes es muy difícil.
B2B en términos generales la expresión business-to-business no se encuentra limitada al entorno electrónico, sino que hace una referencia de exclusión para destacar el origen y destino de una actividad que, por antagonismo, no se refiere ni al B2C, B2G, etc.
Solo por establecer un ejemplo de referencia, el business-to-business aplica a la relación entre un fabricante y el distribuidor de un producto y también a la relación entre el distribuidor y el comercio minorista… pero NO a la relación entre el comerciante y su cliente final (consumidor), relación esta última que quedaría ajustada entonces al entorno del B2C (business-to-consumer).
B2E (del inglés business to employee, empresa a empleado) es la relación comercial que se establece entre una empresa y sus propios empleados. Por ejemplo, una empresa aérea puede ofrecer paquetes turísticos a sus empleados a través de su propia intranet y, además de sus ofertas puede incluir las de compañías aéreas asociadas. El B2E es una nueva demostración de las muchas aplicaciones que ofrece el comercio electrónico. Pero no sólo eso, además el concepto se amplia a la propia gestión remota por parte del empleado de parte de sus responsabilidades dentro de los procesos de negocio de la empresa. Esto podría incluir facturación de comisiones de ventas, introducción de gastos de desplazamiento, etc. Es en definitiva un pequeño portal para la utilización de algunos recursos de la empresa por parte de los empleados de la misma, tanto en su quehacer cotidiano, como en la vida privada.
y para cerrar todos estos conceptos y poder relacionarlos, les dejo una presentación que me pareció muy interesante para analizarla y aprovechar ciertos aspectos aquí tratados a la hora de armar una estrategia y plan de pruebas.