ISTQB CTFL v2018. 5. Gestión de la prueba. Presentación y ejemplos básicos.

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Intro

La unidad 5. Gestión de la prueba, se compone de los siguientes puntos:

5. Gestión de la prueba
5.1. Organización de la prueba
5.1.1. Prueba independiente
5.1.2. Tareas de un jefe de prueba y un tester
5.2. Planificación y estimación de la prueba
5.2.1. Propósito y contenido de un plan de prueba
5.2.2. Estrategia y enfoque de la prueba
5.2.3. Criterios de entrada y criterios de salida (Definición de preparado y definición de hecho)
5.2.4. Calendario de ejecución de prueba
5.2.5. Factores que influyen en el esfuerzo de prueba
5.2.6. Técnicas de estimación de la prueba
5.3. Monitorización y control de la prueba
5.3.1. Métricas utilizadas en la prueba
5.3.2. Objetivos, contenidos y audiencias de los informes de prueba
5.4. Gestión de la configuración
5.5. Riesgos y prueba
5.5.1. Definición de riesgo
5.5.2. Riesgos de producto y riesgos de proyecto
5.5.3. La prueba basada en el riesgo y la calidad de producto
5.6. Gestión de defectos

Presentación

La gestión de la prueba es una parte esencial del proceso de pruebas de software. En esta síntesis, exploraremos los conceptos clave de la gestión de la prueba según el Programa de Estudios Nivel Básico ISTQB CTFL versión 2018.

Comenzamos por comprender la organización de la prueba. En la organización de la prueba, se distingue entre la prueba independiente, que es realizada por un equipo de pruebas separado del equipo de desarrollo, y la prueba integrada, donde los testers son parte del equipo de desarrollo. Se definen las tareas y responsabilidades tanto del jefe de prueba como del tester, y se establece una estructura adecuada para garantizar la eficacia y eficiencia de la prueba.

La planificación y estimación de la prueba son aspectos críticos para el éxito del proyecto. Se elabora un plan de prueba que define el propósito y el contenido de la prueba, así como la estrategia y el enfoque que se seguirán. Se establecen criterios de entrada y salida, conocidos como «definición de preparado» y «definición de hecho», respectivamente. También se crea un calendario de ejecución de pruebas para gestionar el tiempo y los recursos. Además, se consideran los factores que influyen en el esfuerzo de la prueba y se utilizan técnicas de estimación para determinar los recursos necesarios.

La monitorización y control de la prueba son fundamentales para asegurar que la prueba se realice de manera efectiva. Se utilizan métricas para medir y evaluar el progreso de la prueba, como la cobertura de prueba y el número de defectos encontrados. Se generan informes de prueba que tienen diferentes objetivos, contenidos y audiencias, proporcionando información relevante a los diferentes interesados del proyecto.

La gestión de la configuración se refiere al control y seguimiento de los elementos de configuración relacionados con las pruebas, como los casos de prueba, los entornos de prueba y los datos de prueba. Se establecen procedimientos para gestionar los cambios en la configuración y garantizar la integridad de los elementos de prueba.

La gestión de riesgos es otro aspecto crucial de la gestión de la prueba. Se define el riesgo como la posibilidad de que un evento no deseado ocurra y se identifican los riesgos tanto del producto como del proyecto. Se aplica la prueba basada en el riesgo, priorizando las pruebas en las áreas de mayor riesgo. Además, se evalúa la calidad del producto en relación con los riesgos identificados.

La gestión de defectos implica el seguimiento, el control y la resolución de los defectos encontrados durante la prueba. Se establece un proceso para reportar y rastrear los defectos, y se asignan responsabilidades para su corrección. La gestión de defectos contribuye a mejorar la calidad del software y asegurar que los problemas sean abordados de manera oportuna.

En resumen, la gestión de la prueba desempeña un papel fundamental en el proceso de pruebas de software. La organización adecuada, la planificación y estimación, la monitorización y control, la gestión de la configuración, la gestión de riesgos y la gestión de defectos son aspectos clave a considerar para garantizar el éxito de las pruebas.

Ejemplos básicos

Organización de la prueba
Ejemplo: Como tester en un proyecto de desarrollo de software, trabajas de manera independiente realizando pruebas funcionales, pruebas de rendimiento y pruebas de usabilidad en diferentes módulos del sistema. Tu tarea principal es analizar los requisitos, diseñar casos de prueba, ejecutar pruebas y documentar los resultados de forma autónoma.

Tareas de un jefe de prueba y un tester
Ejemplo: En un equipo de prueba, el jefe de prueba es responsable de coordinar y supervisar las actividades de prueba. Se encarga de asignar tareas a los testers, revisar y aprobar los casos de prueba, analizar los resultados de la prueba y proporcionar informes de progreso al equipo de desarrollo. Por otro lado, como tester, tu labor consiste en ejecutar los casos de prueba asignados, reportar los defectos encontrados y colaborar con el jefe de prueba en la mejora continua del proceso de prueba.

Planificación y estimación de la prueba
Ejemplo: Como tester, participas en la planificación y estimación de la prueba para un nuevo sistema de gestión de proyectos. Juntamente con el equipo, desarrollas un plan de prueba que define los objetivos, alcance, estrategia de prueba y recursos necesarios. Estimas el esfuerzo requerido para realizar las pruebas y determinas un calendario de ejecución que se ajuste a los plazos del proyecto.

Monitorización y control de la prueba
Ejemplo: Durante la fase de pruebas, utilizas diversas métricas para monitorizar y controlar el progreso y la calidad del software. Registras el número de casos de prueba ejecutados, el porcentaje de cobertura alcanzado y el número de defectos encontrados. Utilizas esta información para evaluar el progreso de las pruebas y tomar decisiones informadas sobre la calidad del software.

Gestión de la configuración
Ejemplo: Como parte del equipo de prueba, trabajas en colaboración con el equipo de desarrollo y la gestión de la configuración para asegurar que las versiones correctas del software estén disponibles para las pruebas. Te aseguras de que los cambios realizados en el software sean adecuadamente registrados y que los entornos de prueba estén configurados correctamente para cada versión.

Riesgos y prueba
Ejemplo: Antes de comenzar las pruebas, identificas los riesgos potenciales en el proyecto y los relacionas con las áreas críticas del software. Utilizas un enfoque basado en el riesgo para priorizar las pruebas y asignar más recursos a las áreas más propensas a errores. Por ejemplo, si identificas un riesgo en el módulo de pago en línea, dedicas más esfuerzo y tiempo a la prueba exhaustiva de esa funcionalidad.

Gestión de defectos
Ejemplo: Como tester, registras los defectos que encuentras durante las pruebas utilizando un sistema de gestión de defectos. Documentas los detalles del defecto, como la descripción, pasos para reproducirlo y la severidad del problema. Colaboras con el equipo de desarrollo para analizar y resolver los defectos, asegurando que se realice un seguimiento adecuado

Gus Terrera

Apasionado por el agile testing y la ia.